Por Fernando Fernández Acevedo Abogado | Director de Araucanía Digital | CEO de AltLegal

La nueva Ley de Protección de Datos Personales en Chile ha generado un sinfín de debates centrados en sus sanciones y la creación de una Agencia de Protección de Datos. Sin embargo, este marco legal también abre un abanico de oportunidades que la industria tecnológica puede y debe aprovechar.

1. Desarrollo de soluciones tecnológicas innovadoras

La ley exige a las empresas implementar medidas técnicas y organizativas para garantizar la seguridad de los datos desde su diseño. Esto impulsa la necesidad de herramientas avanzadas, como sistemas de encriptación, plataformas de gestión de consentimientos y evaluaciones de impacto. Las empresas tecnológicas tienen aquí una oportunidad única para desarrollar productos y servicios que cumplan con estos requisitos, tanto para el mercado local como internacional.

2. Ventaja competitiva a través del cumplimiento

Contar con modelos de prevención de infracciones (MPI) certificados no solo asegura el cumplimiento normativo, sino que también posiciona a las empresas como socios confiables. En un entorno globalizado, esta confianza es clave para acceder a mercados regulados, como Europa bajo el GDPR, y para competir en industrias donde la privacidad y la seguridad son diferenciadores críticos, como lo es HealthTech, FinTech, EduTech, GovTech, entre otros.

3. Impulso a la transformación digital

La nueva ley permite a las empresas tecnológicas establecer sistemas de gobernanza de datos, fundamentales para el desarrollo y la implementación responsable de soluciones de inteligencia artificial (IA). Este enfoque asegura que los datos personales se utilicen de manera adecuada, garantizando transparencia, seguridad y cumplimiento normativo. Un sistema de gobernanza bien diseñado no solo mejora la ciberseguridad, sino que también crea una base sólida para desarrollar aplicaciones de IA que respeten los derechos de los usuarios, promoviendo su confianza y aceptación.

4. Creación de confianza y lealtad

Los consumidores valoran cada vez más a las empresas que demuestran un compromiso ético en el manejo de datos personales. La transparencia en el tratamiento de la información fortalece la relación con los clientes, aumentando su lealtad y posicionando a las organizaciones como líderes responsables.

5. Expansión de mercados y colaboración internacional

Cumplir con estándares internacionales de protección de datos facilita la colaboración con empresas extranjeras y la entrada a nuevos mercados. Esto genera un potencial significativo para que las compañías tecnológicas chilenas amplíen su alcance y se posicionen como referentes en la gestión ética de datos.

En síntesis, la nueva Ley de Protección de Datos Personales no debe verse solo como una imposición regulatoria, sino como un catalizador para la innovación y el crecimiento en la industria tecnológica. Las empresas que sepan adaptarse y aprovechar estas oportunidades no solo cumplirán con la ley, sino que también liderarán en un mercado cada vez más exigente y competitivo.